La
empresa es un acumulado de elementos de producción, concibiendo como tales las
naturalezas necesarias para
producir (bienes naturales
o semielaborados, componente,
labor, maquinaria y otros bienes de capital); factores mercadotécnicos, ya
que los productos no se venden por sí solos, y factores económicos, para efectuar
las otras tareas, es justo formalizar cambios y éstos han de ser capitalizados
de alguna forma. Toda empresa
tiene fines u
objetivos, que establecen
la adecuada razón
de su vida. Los
diferentes factores que
componen la empresa
se localizan clasificados
para conseguir sus fines, sin esta
relación la empresa no existiría; se presentaría de un solo grupo de elementos
sin vínculo entre sí y, por ende, inhábiles para alcanzar cualquier objetivo.
Esa combinación hacia un fin la efectúa otro elemento empresarial que es
la dirección u orientación de
la sociedad. El componente directivo
planea la obtención
de los objetivos,
constituye los principios,
se faculta de
que las disposiciones se
ejecuten y fiscaliza los
posibles extravíos entre
los efectos alcanzados
y los anhelados.
Este factor se comisiona para
unir las energías necesarias para
efectuar los objetivos integrales del sistema empresarial. La empresa
es un sistema, y un sistema
es un conjunto
de elementos o subsistemas, interconectados entre
sí y con
el sistema general,
que pretende conseguir algunos
objetivos.
ÁMBITO
GEOGRÁFICO
Como delimitación
geográfica del medio de acción de la empresa. Ej.: local, interior, exterior,
de un país o región, entre otros.
ÁMBITO
CONCEPTUAL
Como
delimitación conceptual del mercado, relativa a la definición del producto o servicio
informático, mercantil, entre otros, o
en la delimitación descrita al agrupado de
individuos o entidades latentemente consumidoras de los mercados o servicios
infantil, profesional y otras más.
CARACTERÍSTICAS
DE UNA EMPRESA
Desde
una mirada económica, la empresa se caracteriza como una entidad autónoma de
producción de bienes o servicios, en la que se integran de forma coordinada
diversos medios productivos trabajo humano y elementos materiales e inmateriales),
bajo la dirección del empresario.
Desde el
punto de vista jurídico, la noción de
empresa no está rotundamente determinada, debiéndose conseguir
al mismo, de perfil indirecto, por
medio del conocimiento de empresario. Un
empresario es el hombre físico o
jurídico que, de carácter tradicional y no accidental, prepara en designación propia
una acción fructífera regida al mercado, es decir, el que ejecuta
una agilidad empresarial.
Desde la
vista jurídica mercantil, se define a la sociedad como una unidad familiar emancipada
y ininteligible en la que se constituye un conjunto establecido de bienes, retribuciones
y compromisos, bajo la titularidad y orientación del empresario. El propósito
adyacente de la empresa es ocasionar bienes y servicios
para el mercado y su finalidad
mediata, suponiendo que se trate de empresas mercantiles, conseguir
alguna clase de beneficio o lucro para sus dueños.
ELEMENTOS
DE LA EMPRESA.
1. ESTRATEGIA
Tanto
general como fructífero. Dar respuesta a
unas preguntas rasas: ¿De qué partimos? ¿Qué somos? ¿Qué intentamos ser? ¿Dónde
pretendemos competir? ¿Cómo?
Se
deben respetar unos elementos básicos:
No se debe hacer de todo para todos los usuarios.
Debe saber desistir de algo y centralizarse
en lo que mejor se tenga que hacer. Es excelente hacer una cosa bien que cien
mal. No se alcanza competir por precio y por
calidad. O una cosa u otra.
1.
PRODUCTO
Es fundamental
desarrollar un producto conforme con la habilidad, caracterizándolo, bien sea
por su precio o por sus condiciones especiales. Sólo se logra rivalizar con éxito si se brinda
al cliente una primacía. La sociedad que
no ofrece ninguna mejoría, más rápido o más tarde será quitada del mapa.
Suele
ser el mecanismo en el que más se agrupan los pequeños empresarios, aunque
todavía no lo hacen bien.
3. ORGANIZACIÓN
Si bien
a varios empresarios le suene a chino, todo negocio ha de precisar su
organigrama, determinando a cada individuo unos trabajos claros y un contorno
de imperio y compromiso claro. Y respetando unos elementos básicos:
Cada hombre debe tener un director, y sólo
uno
Un jefe tiene un término de personas que obedezcan
a él o ella
Debe existir una orientación general exacta
Conviene que haya una comisión de itinerario
donde el administrador general participe la dirección con los directores que obedecen
a él o ella
4. CONTABILIDAD
Debe llevar
una contabilidad, tanto ordinaria como razonada, bien cargadas y bien especuladas.
Y no debe dimitir su diseño sólo a los contadores. La autoridad general se debe involucrar en
ello.
5. CONTROL
DE GESTIÓN
Precisar
la cuenta de efectos analíticos y los márgenes y reportarlos con una periodicidad
mensual o al menos trimestral. Ofrecerle
el necesario esmero en la comisión de dirección. No se debe agenciar sin un cuadro legítimo de
gestión, no formarlo sería como transportar un coche sin cuadro de imperios. Los resultados los ha de ocasionar la
contabilidad.
6. PLANIFICACIÓN
Se
deben hacer presupuestos, para poder planear un espacio de futuro, al menos
para un año, y para lograr contrastar los resultados con lo predicho. Calcular no es anunciar, es proyectar una escena
de referencia. No presupuestar es como transportar sin saber adónde se va.
7. EVALUACIÓN
De
acuerdo al organigrama y a los presupuestos, debe crear objetivos a las
personas y calcular su trabajo habitualmente, para reconocer a los mejores e estimularlos.
Y para ser razonable y aislar del equipo a los que no sean convenientes o fructíferos. Existen diversas compañías que no los han perfeccionado.
Y así les va. En las épocas de vacas gordas se lograba sobrevivir sin ellas.
Ahora no. En las grandes empresas suelen
preexistir todos o casi todos, y bien desarrollados; en la medianas suelen fracasar
algunos, y en las pequeñas empresas falla la generalidad, cuando no todos, sin
que haya pretexto, aunque trabajarlos no es tan costoso ni tan dificultoso como
parece. Todo financiero puede instruirse para emprender por sí mismo o solicitarle
a un asesor que le echar una mano.
.
CLASES DE EMPRESAS
Existen
varias clases de empresas, clasificarlas en función a algunos criterios. Los
más importantes son los siguientes:
SEGÚN
SU TAMAÑO
Las
empresas pueden clasificarse según su tamaño en grandes, pequeñas o
medianas. Las razones para realizar esta clasificación son:
Principio
económico. Es el volumen de despacho, es decir, las entradas adquiridas por las
ventas.
Principio
técnico. Es el nivel tecnológico: la creación del capital.
Principio
patrimonial. Es el patrimonio que posee: capitales, derechos y compromisos.
Principio
organizativo. Es el número de trabajadores de la empresa y el de su estructura.
NEGOCIOS DE CRITERIOS
QUE DEMARCAN EL TAMAÑO DE LAS EMPRESAS
|
||||
EXTENSIÓN
|
NÚMEOR DE EMPLEADOS
|
VOLUMEN DE FACTURA
ANUAL
|
TOTAL ACTIVO
|
|
MICROEMPRESAS
|
0 - 9
|
≤ 2.000000 €
|
≤ 2.000.000 €
|
|
PEQUEÑAS EMPRESAS
|
10 - 49
|
≤ 10.000.000 €
|
≤ 10.000.000 €
|
|
MEDIANAS EMPRESAS
|
50 - 249
|
≤ 50.000.000 €
|
≤ 43.000.000 €
|
|
EMPRESAS GRANDES
|
Más de 250
|
Ø 50.000.000 €
|
Ø 43.000.000 €
|
|
A pesar
de estos criterios, no existe un tamaño fijo, aceptado por todos, para
establecer la clasificación. Normalmente el criterio más utilizado es el
organizativo, referente al número de trabajadores.
SEGÚN
EL SECTOR ECONÓMICO DONDE DESARROLLAN SU ACTIVIDAD
Sector
primario. Desarrollado por las empresas que se ofrecen al aprovechamiento
de los recursos naturales, entre estas son las empresas agrarias, pesqueras,
ganaderas, mineras y agrestes.
Sector
secundario. Son las sociedades que se ofrecen a las acciones
transformadoras o fabriles empresas textiles, fabriles, químicas, entre otras. Igualmente se incluyen al sector de la arquitectura
y al energético.
Sector
terciario. Abarca a dos grupos de empresas: las productivas, que se ofrecen
a la venta de artefactos sin evolucionar, como un kiosco o una farmacia, y las
de servicios, por ejemplo una financiera o un hospital.
SEGÚN
LA PROPIEDAD DE SU CAPITAL
La
propiedad del capital de una empresa reconoce tres tipos diferentes:
La empresa
privada es propiedad de personas físicas o jurídicas individuales. Por
ejemplo, Danone, Camper, El Corte Inglés, Telepizza o cualquier bar cercano a
nuestra casa.
La empresa
estatal es propiedad del Estado o de alguna entidad de perfil público, por
ejemplo, RENFE o Correos.
La empresa
mixta es la empresa que tiene propiedad cooperada entre el Estado y privativos,
por ejemplo, Altadis (antigua Tabacalera).
SEGÚN
EL ÁMBITO DE ACTUACIÓN.
En cargo
del ámbito geográfico en el que las sociedades efectúan su agilidad, se puede diferenciar
entre empresas particulares, locales, nacionales o multinacionales.
SEGÚN
SU FORMA JURÍDICA
Esta
clasificación nos enseña dos grandes tipos de empresas.
Empresa
individual. Es cuando tiene un solo capitalista
que es una persona física. Por ejemplo, una peluquería o un bar donde el
empresario es el propietario de dicho establecimiento.
Empresa
societaria o sociedad. Se destina a la empresa constituida por varios capitalistas
que se relacionan y, por medio de un contrato, se exigen poner en común patrimonios,
dinero o trabajo. La característica esencial
de las sociedades es que utilizando dicho contrato nace un elemento jurídico
nuevo y distinto de las personas físicas que conforman la empresa. Dentro de
este tipo se encuentran las Sociedades Anónimas (S.A.), Sociedades de
Responsabilidad Limitada (S.R.L.), Sociedades Colectivas, Sociedades
Comanditarias y las sociedades de interés social, como son las cooperativas y
las sociedades laborales.
EMPRESA INDIVIDUAL
|
EMPRESARIO INDIVIDUAL
|
||
EMPRESA SOCIEDAD
|
SOCIEDAD
MERCANTIL
|
PERSONALISTA
|
Sociedad Colectiva
Sociedad comanditaria simple
|
CAPITALISTA
|
Sociedad comanditaria simpe
Sociedad de responsabilidad limitada
Sociedad anónima
Sociedad laboral
|
||
Sociedad de interés social
|
Sociedad cooperativa
|
EL EMRPESARIO A LO LARGO DE LA HISTORIA
La
noción de empresario ha sufrido magnas alteraciones desde la época del mercantilismo
hasta la época actual. De ser el dueño de la empresa y el que tomaba las
decisiones, ha pasado a establecerse en una imagen mucho más confusa, que no precisamente
tiene que ser un individuo real ni el dueño de la compañía.
LOS
CLASICOS
En
el período de la Revolución Industrial el administrador es individual. Según ecónomos
de la escuela tradicional como Adam Smith o Ricardo, el empresario era un comerciante
sedentario en el que concordaban las figuras de capitalista y de interventor de
los medios de fabricación. No fue hasta
unos años más tarde cuando R. Cantillon (1680-1734) concibió por primera vez la
figura del empresario como un hombre de transacciones, debido a que era el oficial
que adquiría los medios para producir y, consecutivamente, revendía a un precio
inseguro. El empresario, efectivamente, era una persona que asumía riesgos ya
que no sabía si recobraría la inversión generada.
EL
EMPRESARIO ORGANIZADOR
Debido
a los progresos tecnológicos del tiempo, al incremento de mercados y al
surgimiento de grandiosas necesidades del capital, surgen por primera vez las
grandes colectividades, en las que numerosos propietarios invierten colectivamente
en la empresa. Con el arribo de este carácter societario se principian a alejar
por primera vez los objetivos del administrador y del capitalista, naciendo de
esta forma lo que el experto Marshall designó como empresario organizador.
El
mercantilismo llega a una época en la cual el capital se fragmenta entre un
número extenso de asociados y se elige al administrador en función de su
capacidad. Este nuevo empresario confronta ahora un peligro más competitivo que
patrimonial, ya que lo que este expone no es su dinero, sino su sitio de
trabajo. Las funciones de este empresario experto son, pues, las de establecer,
proyectar y regir componentes en la obtención de un bien para los capitalistas.
EMPRESARIO
RIESGO
Se
refiere, a la hipótesis financiera del economista Knight, concibiendo al empresario
como el individuo que obtiene el riesgo producido de la actividad mercantil, ya
que aumenta una cantidad de dinero real y seguro con el objetivo de acumular un
favor incierto. Knight siguió diferenciando
entre el empresario competitivo, que era el que daba los preceptos de gestión
de la empresa y desplegaba el cargo de disposición; y el empresario propio, que
era el que hacía el gasto de dinero y, por tanto, obtenía el riesgo.
EMPRESARIO
INNOVADOR
Según
Shumpeter, otro experto de la época, no era el riesgo el componente interpretativo
de los lucros del empresario, sino la primicia y el avance técnico. Según él,
los períodos del cambio tecnológico eran tres: iniciativa, invención e reproducción.
Para
Shumpeter, el dueño era la figura que concebía e innovaba en el mercado, de tal
manera que exigía a los competitivos a imitar su innovación. Mientras esto acontecía
o no, los favores para la sociedad eran enormes. El fin del empresario, por
ende, no era otro que idear y renovar para así obtener unos favores extra que acabarían
desapareciendo cuando los competidores le copiasen.
TECNOESTRUCTURA
La
dispersión entre la pertenencia y el control de la empresa trae consigo que el volumen
de muchas estructuras y la complejidad de las medidas que en ellas hay que
tomar sea tal que varias empresas no logren ser regidas por un solo individuo,
sino por un órgano colegiado que se puede llamar tecnoestructura, desarrollado
por un conjunto de especialistas en las diferentes áreas de acción de la
empresa. Esta expresión fue contrastada por el economista Galbraith. Podemos decir que esta orientación participada
por técnicos se efectúa en las grandes sociedades, donde los socios son solamente
inversionistas que tienen como único oficio lograr una ganancia por su capital
invertido. Empero, en las compañías particulares o familiares, pequeñas y
medianas empresas, queda el primitivo poder del capitalista o propietario.
EL
EMPRESARIO EN LA ACTUALIDAD, DESCUBRIDOR DE OPORTUNIDADES
Actualmente
el dueño de una empresa ha de ser inventor, asimismo de un buen líder y saber
ser un buen táctico para elegir los caminos apropiados para adquirir los
objetivos. La nueva representación del empresario tiene las siguientes
características:
El
empresario ya no es precisamente el dueño de la empresa, no obstante en las
empresas de pequeño tamaño siga siendo así. Esto se debe a la ausencia entre la
propiedad y la revisión de la misma.
El
empresario no debe ser una única persona. En algunos casos, sobre todo en las
empresas de mayor tamaño, el empresario se cambia a un órgano colegiado, como ocurre
con el consejo de dirección de las corporaciones anónimas.
La
diligencia del empresario no tiene por qué ser de paradigma técnico. Más bien
se consagra a fijar objetivos, instituir planes, instaurar la empresa, etc.
Este cargo se denomina administración, o management.
En
contundente, se debe diversificar entre el administrador profesional, que es el
que tramita y dirige la empresa aun no teniendo aportado patrimonio a la misma;
y el empresario patrimonial, que ha contribuido capital a la empresa y que posee
como principal objetivo concebir rentable su inversión.
ACTIVIDAD
1. Defina empresa
3. En un mapa conceptual defina los elementos de una empresa
4. Cuál es el ámbito geográfico y conceptual de una empresa
5. Diga las características de una empresa
6. Cuáles son los diferentes factores que componen una empresa
7. En un cuadro comparativo escriba las características de cada clase de empresa
8. Un empresario clásico era un inventor, un
buen líder? Explique
9.
Un empresario de tecnoestructura puede tener
la pertenencia y el control de la empresa? Explique
10.
Un empresario organizador asume riesgos? Explique
11.
Un empresario en la actualidad es descubridor
de oportunidades? Explique
12.
Un empresario innovador se empezó en la
revolución industrial? Explique
13.
Haga un ejemplo de cómo sería usted un
empresario en la actualidad, bien explicado
BIBLIOGRAFÍA
BIBLIOGRAFÍA
https://definicion.de/empresa/
https://debitoor.es/glosario/definicion-empresa
https://www.entrepreneur.com/article/268966
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